El RACC cuestiona la entrada en vigor de la nueva tasa sobre las emisiones de CO2 durante la pandemia
Por: RACC Blog
El nuevo impuesto afecta a todos los propietarios de vehículos de motor aptos para circular en las vías públicas.
Ante la situación económica que vive el país a raíz de la pandemia, el RACC ha trasladado a la Generalitat de Catalunya su preocupación sobre los efectos negativos para la economía de las familias y para el sector del automóvil que puede tener el nuevo impuesto sobre las emisiones de dióxido de carbono (CO2) que se aplicará a los vehículos de tracción mecánica.
Aunque la Administración ha dejado sin efecto el impuesto en el ejercicio 2019 y aunque para el ejercicio 2020 (que se meritó el 31 de diciembre de 2020) se aplique la tarifa más baja, el Club considera que afectará a muchos ciudadanos que ya están sufriendo una reducción importante de sus ingresos y, a la vez, impactará gravemente en un sector en crisis, el de la automoción, capital para la economía y la ocupación laboral de nuestro país.
Un impuesto que no grava el uso
Este nuevo tributo propio de la Generalitat deberán pagarlo todos los propietarios de vehículos (coches, furgonetas, motocicletas y ciclomotores, autobuses, camiones, tractores, remolques y semirremolques arrastrados por otros vehículos…) aptos para circular en las vías públicas.
El importe final depende de las emisiones que constan en la ficha técnica de cada vehículo; por lo tanto, cuantas más emisiones, mayor cuota. A título orientativo, puede ir de los 6 a los 60€ anuales para la mayoría de los turismos. El importe del ejercicio 2020, si no hay ningún cambio, se publicará en el padrón provisional a partir del 1 de mayo del 2021, en la sede electrónica de la Agencia Tributaria de Cataluña.
Conferencia sobre los actuales retos de la movilidad urbana en la ciudad de Barcelona
En la conferencia Transformación y cambios, impartida por Josep Mateu, Presidente del RACC, en el Círculo de Infraestructuras, se incidió en los retos de movilidad surgidos en Barcelona y en la necesidad de que exista una visión metropolitana para conseguir una movilidad
urbana segura y sostenible y, a la vez, compatible con la actividad económica. Durante el acto también se expuso la profunda transformación a raíz de la covid-19, que ha hecho aumentar los trayectos a pie, en bicicleta y en patinete en detrimento del transporte público.
Fuente: Revista RACC