Coches seminuevos, gerencia, km 0 y stock. ¿Conoces las diferencias?
Por: RACC Blog
Si vas a comprar un vehículo, seguro que oirás hablar de conceptos como coches seminuevos, gerencia, km 0 o stock. Son alternativas de compra diferentes que tienen como nexo común un precio más barato que un coche completamente nuevo.
¿Seminuevos, gerencia, km 0 o stock? Información útil en todos los casos
En algunos casos puedes llegar a ahorrar bastante dinero, pero tienes que valorar los precios en función de lo que realmente te están ofreciendo. En todos los casos debes de tener información clara sobre:
- Condiciones de la garantía y cuál es el período real incluido una vez que tengas el vehículo, también las ampliaciones en tiempo o kilómetros que te puedan ofertar.
- Información sobre qué revisiones se incluyen en el precio de la venta y el coste que pueden representar si no se incluyen.
- En qué situación está la póliza de seguro, las prestaciones y el vencimiento.
- Fíjate bien en el número de kilómetros para que no te encuentres con sorpresas.
- El coche debe estar en perfectas condiciones, lo cual debes exigir al vendedor.
- Infórmate del precio del coche completamente nuevo y con equipamiento y motorización semejantes, para que puedas comparar y valorar la oferta en su justa medida.
- El coche ha ido perdiendo valor residual, ya que no es nuevo.
- En el caso de los ya usados, pide información de cuál había sido el uso anterior del coche.
Las diferencias entre esas opciones de compra las podemos dividir en dos grupos: los que no han hecho ni un kilómetro y los que ya han sido usados en mayor o menor medida.
Coches ya usados
Seminuevos
Por coche seminuevo se entiende aquel que no ha superado los dos años de antigüedad o los 25.000 km. Eso puede suponer que compres un coche con las mismas características del mismo modelo completamente nuevo, aunque con dos años más; pero puede ser también que compres un coche con un motor o una plataforma de una generación anterior, con las diferencias que eso puede representar también de equipamiento de seguridad, consumo y emisiones.
En este caso en particular, debes estar atento al estado de las ruedas y de los neumáticos en particular, porque, por ejemplo, con 25.000 km, en según qué condiciones haya rodado el coche (igual era de una empresa de alquiler), puede que estén casi al límite, si no se han cambiado, por lo que deberías tener en cuenta cuánto pueden costar los neumáticos nuevos.
De gerencia
Los coches de gerencia también son seminuevos, pero generalmente suelen tener alrededor de un año de antigüedad. Debes fijarte en el número de kilómetros, porque en un año se pueden hacer muchos recorridos diferentes.
Normalmente, los han usado empleados de los concesionarios, incluso posibles compradores a los que se les ofrece hacer una prueba, por lo que el automóvil estará en principio en buenas condiciones y además suele tener un buen nivel de equipamiento.
Coches que no han hecho ni un kilómetro
Km 0
Este tipo de automóviles van asociados generalmente a los objetivos de número de matriculaciones que exigen las marcas a los concesionarios, por lo que tienen que dar de alta obligatoriamente un determinado número de vehículos.
No se han utilizado, por lo que son realmente como nuevos, por eso son conocidos como km 0. Han perdido, en todo caso, un poco de valor residual según el tiempo que lleven matriculados, pero puede resultar inapreciable. En cuanto a la garantía, también debes pensar que empieza a contar desde el momento en que se matricularon.
Coches de stock
A diferencia de los km 0, estos coches, aunque lleven un cierto tiempo fabricados, no se han matriculado, por lo que el “contador” no se ha puesto en marcha. Hay que tener en cuenta que puede que hayan estado a la intemperie en el concesionario o en zonas de la propia marca.
Son vehículos que se han solicitado al fabricante como previsión de aumento de ventas o porque va a aparecer una nueva generación de ese modelo y pueden tener una buena salida. Es una buena idea si coincide bastante con el equipamiento y motorización que tenías pensado, o quizá puedas cambiar de opinión según la oferta.