De Can Boix de Peramola a la falda del Pedraforca con el Jaecco 7

Nos despertamos en el Hotel Can Boix de Peramola, un alojamiento que se encuentra entre las montañas del Alt Urgell y que desde 2023 ha pasado a formar parte del grupo de gestión hotelera catalán Slow Life Hotels. El amanecer es espectacular. Con los primeros rayos de luz, la vida empieza a activarse. La niebla leridana hace acto de presencia y se extiende como un mar a lo lejos, mientras la luz anaranjada va bañando las montañas del fondo, y tras las ventanas del hotel empieza un nuevo día. Las persianas se suben lentamente, llega el furgón del pan recién horneado, y nosotros nos preparamos para una nueva aventura. Tras coger fuerzas en el salón de desayunos, es hora ya de partir con el Jaecco 7 hacia nuestro siguiente destino, el imponente Pedraforca.

Para esta ruta, hemos optado por el Jaecco 7, el todoterreno de la marca Chery que se ha convertido en una de sus apuestas más prémium. En él, la tecnología asume un papel protagonista en la experiencia de conducción, en la que decenas de sistemas reducen la carga sobre el conductor para permitir disfrutar de la carretera más conscientemente. Su sistema de cámaras 360º, igual al del Omoda 5 que probamos en la ruta anterior, permite ver el coche desde todos los ángulos y evitar los puntos ciegos. 

Además, su avanzado sistema de modos de conducción nos permite hilar tan fino que, además de elegir la tracción del coche, podemos determinar si vamos a conducir por nieve, barro o arena, para que el propio vehículo seleccione las configuraciones óptimas para cada terreno. Su espacioso habitáculo, el techo solar y el sistema de calefacción y aire acondicionado en las dos filas de asientos lo hacen especialmente cómodo para viajar en familia. Además, su gran pantalla central puede verse desde todos los asientos para involucrar a todos los pasajeros en la experiencia de la navegación o el entretenimiento. 

Inmersos en la experiencia tecnológica del Jaecoo 7, empezaremos nuestra salida hacia una de las montañas cuyo perfil es uno de los más emblemáticos de Cataluña, y confieso, con permiso, que esta ruta es una de mis favoritas. Desde Can Boix de Peramola nos tomará unas 2,5 horas llegar, y las carreteras nos irán llevando por bonitos bosques, prados y pueblecitos en los que podremos disfrutar de las vistas, la tradición y la tranquilidad. Además, si eres socio del RACC podrás disfrutar de este hotel con un 8% de descuento sobre el precio del alojamiento indicándolo en el momento de la reserva.

En primer lugar, nada más salir del hotel, retomaremos el camino por el que llegamos ayer (LV-5119) y atravesaremos nuevamente el río Segre. Rápidamente enlazaremos con la C-26 e iremos recorriendo camino hasta el desvío de la LV-4011 poco antes de Solsona. En este punto dejaremos atrás los valles de los que veníamos y empezaremos a ascender montañas. En este tramo los miradores empiezan a sucederse uno tras otro y regalan, a cada cual, vistas más espectaculares. Así, entre montañas, seguiremos ascendiendo al parque natural por el Port del Comte, el Coll de Port y La Vansa hasta llegar a Tuixén. Esta es la alternativa que hemos diseñado nosotros para la ruta, pero al Pedraforca se puede llegar por distintas carreteras de la zona, todas igualmente reviradas y con espectaculares vistas. 

Tras pasar Tuixén, dejaremos la C-462 y tomaremos la C-563 ya en dirección a Gósol. En este tramo pasaremos por pueblecitos pintorescos en los que, si disponemos de tiempo, es agradable dar un paseo. Una vez en Gósol, el pueblo que se encuentra a los pies del Pedraforca, nosotros hicimos una parada en la plaza para tomar un café, disfrutar del ambiente tranquilo y pasear por sus calles de casas de piedra.

Tras la parada, ponemos rumbo al mirador de Gresolet, donde podremos disfrutar de unas espectaculares vistas del parque natural del Cadí-Moixeró desde sus dos plataformas. El camino ahora es corto, y el desvío se encuentra indicado en la propia carretera, pero deberemos estar atentos para dejar la B-400 a tiempo y desviarnos a la izquierda para empezar a ascender. 

La ruta puede terminarse aquí para disfrutar del espectacular entorno natural en el que nos encontramos, con alguna de las decenas de rutas de senderismo que pueden hacerse por la zona, o continuar por la misma B-400, tras deshacer el camino, para ir a Berga a comer. Esperamos que toméis el camino que toméis, disfrutéis de la mañana… 

¡Nos vemos en la próxima ruta!

Mapa de la ruta

Galería Jaecoo 7