Manías de los conductores que todos odiamos
Por: RACC Blog
Dicen que aprendes a conducir cuando, además de controlar la mecánica del coche y las normas de circulación, eres capaz de preveer las maniobras de otros conductores. Después de años de conducir, muchos adoptan vicios mientras conducen. Algunas de estas manías de los conductores solo las perciben los acompañantes del vehículo como, dejar la mano apoyada en el cambio de marchas, conducir con una sola mano, sacar el codo por la ventanilla. Otros malos hábitos o rutinas van más allá y pueden convertirse en molestias reales para el resto de conductores. Algunas manías incluso conllevan riesgo en la seguridad.
- Conductores que circulan sobre la línea entre carriles ocupando dos carriles a la vez.
- ¡A todo gas! El que quiere salir el primero en el semáforo y va apretando el pedal del gas con el freno de mano puesto en plan salida de carrera cuando todavía está la luz roja.
- El que nunca usa los intermitentes. Uno de los hábitos o manías de los conductores más común y que además puede suponer sanciones.
- El que se cruza dentro de la rotonda porque siempre va por el carril interior.
- El que intenta aparcar en un hueco que ya se ve de entrada que es más pequeño que su coche.
- El coche de detrás cuando se acerca demasiado a la parte trasera de tu coche.
- El espabilado que se ahorra la cola y se cuela en el último momento. Una de las manías de los conductores que conlleva mayores peligros sobretodo en salidas de autopistas y autovías.
- El que se inventa nuevas plazas de parking y todos le siguen.
- El que hace luces en la autopista para que aceleres. Conlleva un gran riesgo.
- El que se queda en doble fila dentro de la ciudad sin preocuparle nada más.
- El que va solo. Nunca mira los espejos retrovisores al cambiar de carril.
- El que no para de cambiarse de carril en las caravanas y genera más atasco.