Basta con buscar “mujer al volante” en YouTube para confirmar los prejuicios alrededor de las mujeres conductoras.

Para evitar el terreno de los tópicos, nada mejor que afrontar el tema desde la pura investigación. La Fundación RACC publicó el estudio “Feminizar la conducción, ¿por qué no?“, en el que intenta dar una respuesta objetiva a preguntas como las siguientes: “¿Son las mujeres más prudentes como conductoras?” o  “¿Es su actitud personal al volante un factor positivo de diferenciación?”. Para ello, recurre al puro análisis estadítico. Y las cifras dejan poco lugar a dudas: el riesgo que un hombre muera en accidente de tráfico como conductor es de 5,8 casos por cada 100.000 habitantes; en mujeres conductoras, el riesgo se reduce a solo 1 caso por 100.000 habitantes. Como se observa en el gráfico, la probabilidad de fallecer en accidente de tráfico ha disminuido en los últimos años en los hombres, en línea con la reducción general de la siniestralidad, y se ha mantenido estable en las mujeres (aunque en un porcentaje muy bajo). Esta evolución estable se da a pesar de que el número de mujeres conductoras ha aumentado considerablemente en los últimos años: entre 2009 y 2013 se contabilizaron 700.000 nuevas conductoras frente a 200.000 nuevos conductores. Así, las conclusiones del estudio señalan que, a igualdad de circunstancias externas, el balance de seguridad vial es claramente favorable a la población femenina. Otras investigaciones reconocen la diferencia en el estilo de conducción de ambos sexos. Un informe de David Herrero, miembro de la Fundación Heltzen y doctor en Psicología, afirmaba que “las mujeres conducen con ansiedad y a los hombres les cuesta ver el peligro” (2014). Un estudio del Centro de Experimentación y Seguridad Vial (Cesvi) de Argentina, afirmaba que las mujeres son más responsables cuando están al volante, con un mayor porcentaje de uso del cinturón de seguridad y un menor uso del teléfono móvil al volante. Este artículo del diario ABC recogía en 2012 opiniones diversas: un estudio británico constataba que las mujeres tardaban más en sacarse el carné de conducir; un estudio alemán, que les costaba más aparcar; y la DGT, que resultaban mucho menos sancionadas que los hombres. En definitiva, los estudios reconocen que existen diferencias entre hombres y mujeres al volante pero que, en caso de comparación, ellas salen mejor paradas. Todo sea para evitar vídeos como el siguiente…

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