Peugeot quiere pegar fuerte en el competidísimo segmento de los compactos, luchando sin ningún tipo de complejo con el SEAT León, el VW Golf o el Ford Focus entre otros.

No se trata únicamente de un restyling, el 308 de 2013 es un coche completamente nuevo, por fuera y por dentro. Estrena para Peugeot la plataforma EMP2 del grupo PSA, que se aplicará también en cupés, berlinas y monovolúmenes. Al ser más ligera y estar construida con un 15% menos de piezas, supone un ahorro de peso y de costes; con ello logra menor consumo y emisiones y un mejor precio de venta.

La nueva gama de motores, además de más ahorradora, consigue más par y un 10% más de potencia tanto en gasolina como en diesel. Los motores de gasolina son de 82, 125 y 155 CV y en diesel hay dos a elegir, 92 y 115 CV. El consumo medio empieza desde los 3,7 litros.

El diseño exterior es más robusto, más, podríamos decir, “compacto” y atractivo. Aunque es 3 cm más corto que el anterior consigue mantener un buen espacio para los pasajeros y el maletero es 72 litros mayor, hasta los 420.

En cuanto al diseño interior, se perciben cambios interesantes. La marca nos hace fijar especialmente en el puesto de conducción, que ha denominado “i-Cokpit”. Una pantalla de casi 10 pulgadas, un volante más compacto, la información directa sobre-elevada y un cambio de marchas más a mano configuran los aspectos más destacados.

La presentación en sociedad en el Salón de Frankfurt sirve de previa para el inicio de las ventas a partir de octubre. El precio de salida es a partir de 17.100 euros y va hasta los 24.400, sin contar con el ahorro de los que puedan acogerse al nuevo Plan PIVE-3. Toda la gama cumple con la normativa Euro 5 y al contar con unas emisiones por debajo de los 120 g/km no paga impuesto de matriculación.