Alonso tiene contrato hasta el 2016 y Kimi ha firmado por dos temporadas, 2014 y 2015. Ambos conocen la casa y aunque de forma diferente, los dos tienen amigos en Ferrari, donde no olvidan que Kimi fue campeón en el 2007 y dio a la Scuderia dos títulos de constructores, en el 2007 y el 2008, con Massa de compañero.

Kimi y Alonso ganaron a Schumacher por talento cuando éste disponía del mejor monoplaza. Alonso no ha conseguido títulos para Maranello, estuvo muy cerca en Abu Dhabi, cuando sólo cuatro puntos lo apartaron de la gloria. Ha protagonizado carreras épicas y se ha ganado el corazón de los tifosi italianos, pero tras la falta de evolución del monoplaza ha sido muy crítico con el equipo y la prensa italiana lo ha interpretado como un distanciamiento, una pérdida de interés en Ferrari. De ahí que Montezemolo recurra a Kimi para añadir presión al asturiano y al equipo. El presidente quiere ganar el mundial de constructores a toda costa, y para ello necesita dos pilotos que sumen muchos puntos, y no uno solo.

Si Alonso mantiene la confianza en el entorno y Kimi conserva como única motivación la de competir, sin más, la apuesta de juntarlos en un mismo equipo puede ser válida. Pero sólo uno puede ser campeón y si ambos tienen opciones reales de título… ya veremos. Pueden saltar chispas…

La realidad es que todo depende de que el monoplaza mejore. Si en el 2014, como en la presente temporada, no hay resultados porque el monoplaza sigue por detrás de sus rivales, Ferrari seguirá arrastrando pasiones pero se situará de nuevo en un escenario de pesadilla deportiva ya vivido en Maranello antes de la fructífera era Tod-Brown-Schumacher.

Aprovechamos para rememorar un duelo épico entre Alonso y Raikkonen en el Gran Premio de Mónaco de 2005.[youtube=http://www.youtube.com/watch?v=nMc8qy6U1o0]

Alonso y Raikkonen frente a frente