Piso de alquiler: ¿quién paga los electrodomésticos estropeados?

En las viviendas, debido al uso continuo o a la falta de cuidado, es habitual que elementos como los electrodomésticos acaben estropeándose y dejen de funcionar. Este problema, que siempre supone un inconveniente en los hogares, puede ser más complicado de solucionar cuando la vivienda está arrendada. Es entonces cuando se plantea la gran duda: ¿es responsabilidad del arrendador o del arrendatario correr con los gastos de la reparación?
¿Quién debe pagar los electrodomésticos según la ley?
Existe una ley que regula los derechos y obligaciones de arrendadores e inquilinos. Se trata de la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU).
En lo que respecta a las reparaciones, se establece que el propietario tiene la obligación de garantizar que la vivienda sea habitable y, por ende, que se mantenga el buen estado de los elementos esenciales para poder vivir en ella. Pero la misma ley también determina que el inquilino debe cuidar el inmueble, por lo que, en caso de que se tenga que realizar alguna pequeña reparación por el desgaste cotidiano de un electrodoméstico, será el arrendatario quien acarree con ella.
Así pues, el propietario debe reparar o sustituir los electrodomésticos en estos casos: cuando la avería se deba al desgaste normal por el paso del tiempo (siempre que el valor sea superior a 150 €), si los electrodomésticos ya presentaban fallos al inicio del contrato, cuando un electrodoméstico se avería durante los 6 primeros meses desde la firma del contrato y si el electrodoméstico es esencial para garantizar la vida en la vivienda (por ejemplo, una caldera).
Por otro lado, corresponderá al inquilino pagar la avería o reparación en dos situaciones: cuando el importe no ascienda a más de 150 € o cuando la rotura se deba al uso incorrecto del electrodoméstico.
En caso de que la LAU no determine con claridad a quién le corresponde pagar, existe también el Código Civil español para resolverlo.
El contrato, clave para evitar conflictos
De todos modos, no es habitual tener que recurrir a la LAU o al Código Civil, ya que muchas de las dudas que se plantean en lo que respecta a averías de electrodomésticos en una casa arrendada quedan resueltas en el contrato de alquiler.
Lo más común es que el propietario incluya una cláusula que especifique claramente quién asume la responsabilidad en caso de avería o sustitución. Asimismo, también se puede incluir, quedando por escrito en el contrato, el estado de cada uno de los electrodomésticos en el momento de la entrega de las llaves. Caso que el contrato no mencionara nada sobre el mantenimiento de los electrodomésticos, y si no se llegara a un acuerdo con el propietario, entonces se aplicaría lo establecido en la LAU. Por ello, es aconsejable documentar con fotografías y descripciones el estado de los electrodomésticos al firmar el contrato.
Pasos habituales para decidir
El primer paso sería avisar al propietario para que este quede informado de la avería o del reemplazo del electrodoméstico. Para determinar de quién es la responsabilidad, lo habitual es recurrir al contrato y ver si indica cómo proceder ante esta situación. En caso negativo, ambas partes pueden intentar llegar a un acuerdo. Si esto no sucediera, se recurriría a la LAU. Y en caso de que esta deje algún resquicio de duda, se consultaría el Código Civil español. Si aun habiendo realizado estos pasos no quedara resuelto el incidente, sería un juez el que determinaría de quién es la responsabilidad.
El mantenimiento de electrodomésticos: un servicio completo
El RACC ofrece un servicio integral de mantenimiento de electrodomésticos que garantiza la funcionalidad y longevidad de tus aparatos. Con tarifas accesibles y planes flexibles, puedes elegir entre diferentes niveles de protección según tus necesidades1. Los técnicos del RACC están capacitados para reparar averías en electrodomésticos de gama blanca, como frigoríficos, lavadoras, secadoras y vitrocerámicas, así como en sistemas de calefacción y aire acondicionado. Además, cuentan con atención telefónica las 24 horas del día, los 365 días del año, y ofrecen una garantía de un año en todas las reparaciones realizadas1. Este servicio te proporciona tranquilidad y seguridad, sabiendo que tu hogar está protegido contra posibles averías.