Voy a alquilar un piso: Pequeños detalles que evitarán grandes problemas
Por: RACC Blog
Alquilar un piso no es una tarea fácil. A parte de encontrar una vivienda que te encante y sientas que puede ser tu casa, hay que tener en cuenta todos los detalles que pueden contribuir a que esa casa acabe siendo un sueño o una pesadilla. Te hemos preparado una lista de las cosas que debes tener en cuenta:
Primero define lo qué quieres:
- Piensa qué tipo de vivienda buscas, de qué tamaños y con qué características.
- Fija tu presupuesto mensual para el alquiler.
- Cuando encuentres ese piso que te gusta, visítalo y tómate tiempo para valorar el estado en qué se encuentra.
- Compara el precio con lo que se ofrece en esa zona: mira anuncios en Internet, inmobiliarias o colgados en las ventanas.
- Habla con los vecinos antes de alquilar un piso para saber cómo es el vecindario y si te puedes encontrar sorpresas desagradables.
- Date una vuelta por la zona para comprobar que cumple con tus gustos y necesidades: si está bien comunicada, si tienes cerca colegios, comercios, servicios, parques, si es suficientemente céntrica o tranquila…
Cuando lo has encontrado y todo te convence, llega la segunda parte: el contrato:
- Antes de acordar nada, asegúrate que el arrendador sea el propietario o la persona autorizada para alquilarlo. Puedes solicitar esa información en el registro de la propiedad. No confíes en alguien que ponga problemas para enseñarte el piso, que siempre te contacte por correo electrónico o que te pida que adelantes el dinero sin haber visto la casa ni haber acordado y firmado las condiciones.
- Siempre mejor un contrato por escrito: tendrás mayor protección ante cualquier percance.
- Negocia todas las condiciones y hazlas constar en el contrato: cuándo hay que pagar, dónde hacer el pago, cómo hacer el pago, quién asume los gastos de mantenimiento y comunidad, por cuánto tiempo es el contrato, la cantidad que abonas como fianza… Un contrato es un acuerdo entre las dos partes y se puede incluir lo que queráis, solo hay que ponerse de acuerdo.
- Revisa las condiciones de la vivienda y todo lo que haya en ella y hazlo constar como inventario en el contrato para evitarte luego sobresaltos.
- No adelantes dinero sin haber firmado un contrato y haber comprobado el estado de la vivienda.
- Asegúrate que los suministros estén dados de alta.
- Asegúrate que el casero haya depositado la fianza en el organismo autonómico competente: es obligatorio por ley y si no lo hace, luego puede haber problemas para recuperar el importe.
Y como siempre es mejor prevenir que curar, ten en cuenta que en el seguro del propietario puede no estar incluido tu mobiliario y capital invertido. Existen estos seguros del hogar adaptados a pisos de alquiler. Y ahora, ¡que tengas suerte al alquilar un piso!