Si vives de alquiler, puede que pienses que tener un seguro de hogar no es necesario porque con la póliza del propietario es suficiente. Sin embargo, como inquilino, tienes la responsabilidad de cuidar la vivienda y, cuando finaliza el contrato, de devolverla en buen estado. Contar con un seguro de hogar para inquilinos puede cubrir algunos desperfectos.

A continuación te contamos todo lo que debes saber sobre un seguro de hogar para inquilinos.

¿Qué es un seguro de hogar para inquilinos?

Un seguro de hogar para inquilinos es una póliza diseñada específicamente para quienes viven en una vivienda de alquiler. Las coberturas que ofrece son muy similares a las del seguro de vivienda. Pero estos seguros se diferencian en que el seguro de hogar para inquilinos se adapta mejor a las necesidades de protección del arrendatario y su familia. Estas pueden incluir la cobertura de los bienes personales o la responsabilidad civil en caso de daños a terceros. 

¿Cuáles son los beneficios?

Cabe destacar que, por ley, el inquilino no está obligado a contratar un seguro de hogar específico, aunque sí es muy recomendable, ya que le aporta tranquilidad al contar con protección. Los seguros de hogar del RACC incluyen, entre otros: 

• Protección de los bienes personales: por si sufres un robo o actos de vandalismo.  
• Responsabilidad civil: el seguro cubre los costes en caso de ocasionar daños a la vivienda o a terceros, como puede suceder en un derrame de agua.
• Cobertura ante imprevistos: como pueden ser los fenómenos atmosféricos, una inundación o el desembarre.
• Asistencia en el hogar.

Además, los seguros del RACC son 100% personalizables, por lo que puedes elegir las coberturas que más te interesen, protegiéndote ante cualquier incidencia en el hogar.

Siniestros ocasionados por el inquilino

Los siniestros ocasionados por el inquilino pueden generar  gastos imprevistos si no se cuenta con un seguro adecuado. ¿Cuáles son los más comunes?

• Daños por agua: es decir, los ocasionados por la rotura de tuberías y escapes en el baño o la cocina, que provoquen filtraciones en la vivienda o en pisos colindantes.
• Incendios: desde un cortocircuito hasta un descuido con velas pueden provocar un incendio que afecte la vivienda o incluso a terceros.
• Roturas accidentales: causados por accidentes dentro del hogar.
• Daños a terceros.

Calcular el coste

Contratar un seguro de hogar para inquilinos es decisión del arrendatario, y por ende, el coste también corre a su cargo. Aunque pueda suponer un desembolso económico anual con el que no se contaba, tener la tranquilidad de saber que se está protegido pesa más.

El coste de esta póliza varía en función de las coberturas contratadas según las necesidades personales. En la web del RACC se puede hacer un simulacro del coste del seguro.

Como hemos visto, aunque no sea obligatorio, contratar un seguro de hogar como inquilino es una decisión inteligente para proteger tus bienes y evitar gastos imprevistos. Antes de elegir, establece tus necesidades y elige la póliza que mejor se adapte a tu estilo de vida. Si buscas un seguro que te ofrezca tranquilidad, consulta las opciones que el RACC tiene para ti.