El usuario de motocicletas es uno de los más vulnerables y el aumento de la siniestralidad de estas no ha pasado desapercibido por la Dirección General de Tráfico, que se ha propuesto proteger a este colectivo con la implantación de nuevas medidas. El colectivo motociclista ha sido el que menos ha reducido la siniestralidad en los últimos diez años, además de haber sido el parque móvil que más ha crecido en la última década.

En el año 2009 había 2,9 millones de motos registradas, mientras que en 2018 esa cifra llegó a los 3,5 millones y no para de crecer a un ritmo del 3% anual, mientras que el resto del parque automovilístico lo hace en un 1%.

Ya os explicamos cuáles eran las infracciones más graves en moto, un aspecto que nos lleva a las cifras de siniestralidad, ya que en 2009 los motociclistas supusieron un 16% del total de las víctimas mortales, mientras que en 2018 el porcentaje aumentó al 20%, significando que dicho colectivo fue el que experimentó un mayor aumento.

Todos estos datos unidos a los del resto de vehículos han obligado a la DGT a modificar la normativa de tráfico y endurecer sanciones económicas y de puntos con respecto a diferentes actuaciones durante la conducción, como con el uso de teléfonos móviles, el cinturón de seguridad, los detectores de radares, los adelantamientos y los cursos de conducción segura para motociclistas. Es con estos últimos con los que los conductores podrán recuperar puntos en caso de pérdida.

En el caso de las motos, todavía está por definir qué tipo de curso deberá realizarse para conseguir sumar los dos puntos prometidos, ya que la DGT todavía no ha hecho públicos los requisitos. Pese a no haber marcado plazos concretos, se espera que esta medida sea efectiva en los próximos meses y que, tal vez, sea extensiva a los conductores de coches.

La realización de cursos de conducción segura es una de las grandes ventajas a la hora de adquirir conocimientos y habilidades en la conducción, ya sea sobre dos o cuatro ruedas.

Ya explicamos anteriormente que los guantes serán obligatorios  y otro de los cambios más significativos, aplicados desde el 12 de noviembre de 2020, ha sido la modificación en la obtención del carnet de conducir, pasando de seis meses a dos años la autorización para realizar las pruebas “en carretera”. Para la obtención del A2 será obligatorio el uso de motos con al menos 15” de rueda delantera, estableciendo para el AM, A1 y A2, un equipamiento obligatorio que conste de casco homologado, chaqueta, pantalones y botas específicas y guantes. Además siempre es importante recordar qué tipos de motos puedo conducir con carnet de coche.