Verbena de San Juan: ¡Ojo! Con los petardos no se juega

Por: RACC Blog

Cohetes, petardos y bengalas son una de las señas de identidad de la verbena de San Juan, y lanzarlos gusta a pequeños… y también a mayores. Pero hacerlo de forma incorrecta o imprudente puede provocar no sólo quemaduras: oídos y ojos también pueden dañarse.

Así sufren tus oídos y tu vista en la Verbena de San Juan

¿Sabías que al explotar los petardos pueden generar entre 65 y 120 decibelios? ¿Y que según la OMS el límite de tiempo que podemos escuchar un ruido de 120 decibelios sin poner en riesgo nuestra salud auditiva es sólo de 9 segundos? Este dato puede darte una idea de por qué, tras una larga noche de verbena, nuestros oídos pueden acabar dañándose. Los acúfenos (sentir un ruido constante aunque se esté en un entorno silencioso) son uno de los trastornos más frecuentes. Y aunque a veces solamente dura unas horas, en ocasiones puede convertirse en algo crónico y muy molesto. No hay que olvidar tampoco que si un petardo explota muy cerca del oído puede provocar que el tímpano se perfore.

Verbena de San Juan

Además el humo y la pólvora de los petardos pueden perjudicar la visión, causando conjuntivitis, daños en la córnea o incluso ceguera si explotan muy cerca de los ojos.

Claves para evitar que un petardo te fastidie la verbena de San Juan

Con una correcta manipulación de los petardos y siguiendo unas normas de seguridad básicas, como las que recoge el siguiente vídeo elaborado por una empresa dedicada a la venta de petardos.

Así, es importante que tengas en cuenta lo siguiente:

  • Cómpralos únicamente en establecimientos autorizados y, antes de decidirte por unos u otros, fíjate en su categoría. La I identifica los de bajo riesgo, mientras que la III se utiliza para los de alto riesgo, que unicamente pueden utilizar los mayores de edad.
  • Los niños deben tirar los que sean apropiados a su edad y siempre bajo supervisión de un adulto. No debemos olvidar, por ejemplo, que en Cataluña más de la mitad de las lesiones graves que se producen por manipular artefactos pirotécnicos afectan a niños y adolescentes.
  • Antes de tirar un petardo, lee las instrucciones de cómo hacerlo y comprueba que está en buen estado (nunca los abras ni manipules). Como norma general enciéndelo siempre en el suelo, nunca cuando lo tengas en las manos, y utiliza una mecha para hacerlo.
  • Úsalos de forma responsable. Nada de lanzarlos contra alguien, encenderlos dentro de casa, en el coche, en el balcón o en la ventana. Tampoco se deben guardar en los bolsillos: déjalos siempre en su envoltorio original.
  • Respeta una distancia prudencial de seguridad. Mientras se encienden aléjate de ellos: evitarás posibles quemaduras o daños en ojos u oídos. Usar tapones para los oídos también puede protegerte. Y vigila que los niños no se rasquen los ojos después de lanzar un petardo (les podrían entrar restos de pólvora).

Si, pese a todo, te quemas…

  • Si la quemadura es leve, enfría la zona afectada bajo un chorro de agua fría (nunca hielo) durante 5 minutos y cubre con una gasa o venda estéril (no apliques antes cremas ni pomadas).
  • Si ves que es muy grande o te salen ampollas (que no debes reventar), solicita asistencia médica. Recuerda que, ante cualquier emergencia, el RACC dispone de un servicio médico 24h, que también puedes utilizar la noche de la verbena de San Juan.