Válvula ancha
Para saber la presión de inflado a la que tenemos que inflar nuestra cubierta, podemos mirar en un lado de la misma, donde normalmente viene indicada la presión máxima a la que podemos inflar nuestra rueda.
Debemos quitar el tapón de la válvula desenroscándola.
Si llevamos mucho tiempo sin hinchar la rueda, es conveniente apretar la punta situada en el interior de la válvula utilizando cualquier objeto punzante que tengamos a mano. De esta manera, se abre el conducto de aire y ahora sí que podremos hinchar la rueda.
Hay que insertar la boquilla del inflador en la válvula utilizando el orificio adecuado para cada válvula y tirar de la leva hacia arriba.
A continuación, inflaremos la rueda hasta llegar a la presión deseada ayudándonos del manómetro del inflador.
Bajaremos la leva de la boquilla y sacaremos la boquilla de la válvula.
Y por último, volveremos a poner el tapón.